Por José Carlos Campos
14 de Agosto de 2025
Digamos que las series del primer playoff de la L(a)MB han caminado entre el poco ruido y las pocas estridencias, han lucido como si sobre ellas hubiera sobrado silencio que revela, al menos para nosotros, que ha pesado más el pesar por la no calificación de las ocho plazas que no tendrán series de postemporada. Y para colmo, el panorama previo a la jornada de ayer jueves lucía muy pesaroso: cuatro de las seis series se encontraban a punto de ya concluir al mostrar ventajas de 3-0. Como con ganas de erradicar las expectativas previas y liquidar el aparente revuelo.
La emoción creada ha durado lo que la víspera.
Es en la zona Sur donde el “apagón” ha sido más acentuado, dos de las tres series ya culminaron luego de que Diablos pusieron fuera a Leones y su equipo “alacena” Guerreros eliminó al Águilas
Así las cosas, la serie Piratas- Pericos, a favor de los primeros 3-1, solo queda en esperar a que el cuadro poblano sea oficialmente declarado el “mejor perdedor”. Sin más trámite, si es que no sucede algo extraordinario.
Las cosas en la zona Norte son algo diferente ya que ahí, a excepción de que los Charros van adelante 3-1 sobre Sultanes, las dos rentes muestran empate a dos triunfos por banco en los duelos entre Acereros y Tecolotes y entre Toros y Algodoneros.
Que si se quiere ver lo estrictamente deportivo pues… este… o sea… sin estridencias y si usted quiere, diremos que con cuestionable apego a la lógica aunque no sabemos si la gasolina le alcance a ésta ya que ya sabemos que la postemporada de béisbol veraniego dura más que un velorio de rancho.
RAZONES– Cual si fuera una exigencia a cumplirse, no faltan quienes al calor de los resultados acuden al casi lugar común que se suelta en los casos de que el equipo de su preferencia se encuentra en la lona. Véase el caso de los Sultanes de Monterrey.
Ante las tres derrotas que los tenían en la lona, se ponen en boga las tesis con aromas a conspiración: “Es que los peloteros están echados porque no les han dado bonos”, “es que la directiva no les ha cumplido a los jugadores”, así por el estilo, jalando la cuerda hasta donde alcance.
Cierto es que los Sultanes terminaron la campaña como los líderes de la división y por ello saltaron a estos playoffs como favoritos pero ¿acaso el de enfrente no cuenta?
Los Charros llegaron a estas instancias como los calificados número seis, con un record, digamos, “rabón” (46-46) pero llegaron y eso parece haberlos motivado. Además, no hay que olvidarlo, tienen como su manager a alguien muy fogueado en estas instancias como lo son los playoffs, Benjamín Gil es toro muy lidiado, que sabe cómo capear temporales y que saca lo mejor de sus peloteros a la hora buena.
Se dirá en descargo que una forma “natural” del aficionado de reaccionar, que es entendible, que así ha sido durante años y zarandajas por el estilo. Lo no tan natural que algunos, digamos, periodistas, se sumen al coro y coincidan con las teorías en la búsqueda de “likes” aumenta-prestigios.
Resumiendo: el rival salió respondón, olvidemos los bonos.
HALAGÜEÑO– Mira que estamos a mitad del mes de Agosto y checar los standings de Grandes Ligas resulta más que alentador, pareciera ser no el algo de “más de lo mismo” sino que algo denota cambio en el status quo, así sea de manera rala.
En la Americana, Toronto comanda la división Este superando a Boston y Yankees que parecen a estas alturas traer poco en el moral. En la Central, Detroit sigue campante, con buena brecha sobre Cleveland y en la Oeste, los Astros y Marineros traen un buen “entre” por el liderato.
Mientras que en la Nacional, en la Este los Filis superan a los Mets, en la Central los muy enrrachados Cerveceros sacan casi tres cuerpo de ventaja sobre los Cachorros mientras que en la Nacional, los inconsistente Dodgers están de la cola con los Padres.
Y ahí viene Septiembre… sabremos quienes traen agarraderas.