“Él y sus hermanos, ‘Los Chapitos’, tomaron el control de la facción de El Chapo en el Cártel de Sinaloa, y debe ser considerado armado y peligroso”, asentó.
Según la descripción del Gobierno de Estados Unidos, Jesús Alfredo Guzmán Salazar es líder de una amplia conspiración que comenzó en 2008 y continúa hasta la actualidad, en la que él y sus tres hermanos, conocidos como “Los “Chapitos”, heredaron las redes de narcotráfico de su padre, Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera.
Señaló que Jesús Alfredo Guzmán Salazar y sus hermanos asumieron y consolidaron el control de la facción de “Los Chapitos” dentro del Cártel de Sinaloa, y posteriormente coordinaron actividades de narcotráfico para contrabandear grandes cantidades de cocaína, generalmente en cargamentos de cientos o miles de kilogramos, así como cantidades de varios kilogramos de heroína, metanfetamina y mariguana, desde México a través de la frontera con Estados Unidos y luego a través de todo el país.
“Los Chapitos”, y otros miembros y asociados bajo su mando en el Cártel de Sinaloa, indicó, también han utilizado la violencia en Sinaloa y Estados Unidos para proteger sus actividades de distribución de drogas.
“Esto incluyó la obtención de pistolas y otras armas, el soborno a funcionarios públicos, la incitación, el uso de la violencia y la amenaza con ella, incluyendo asesinatos, secuestros, asaltos y lesiones contra las fuerzas del orden, narcotraficantes rivales y miembros de su propia organización narcotraficante”.
Estos actos de violencia incluyen el “Jueves Negro” en Culiacán, ocurrida el 17 de octubre de 2019, apuntó, en la que las autoridades mexicanas arrestaron a su medio hermano y cómplice, Ovidio Guzmán López, en Culiacán.
La respuesta, liderada en parte por Jesús Alfredo Guzmán Salazar y sus hermanos, añadió, demostró su influencia cuando cientos de hombres armados respondieron y se enfrentaron a las autoridades mexicanas en tiroteos por toda la ciudad, establecieron fuertes bloqueos viales y causaron la pérdida de múltiples vidas.
Las autoridades de Estados Unidos recordaron que ese resultado obligó al Gobierno mexicano a liberar a Ovidio Guzmán López.
El 6 de abril de 2023, se emitió una orden de arresto federal contra Jesús Alfredo Guzmán Salazar en el Distrito Norte de Illinois por conspiración para distribuir una sustancia controlada, dirigir una empresa criminal continua y lavado de dinero (CÓDIGO DE EE. UU., 21 USC 846, 21 USC 848 y 18 USC 1956).
Guzmán Salazar se encuentra prófugo y se sabe que posee armas de fuego. Debe ser considerado armado y peligroso.