Culiacán, Sinaloa.- 7 de Septiembre de 2025 “¡Ya basta, queremos paz!”, fue el grito que retumbó este domingo en las calles de Culiacán, donde miles de sinaloenses participaron en la Marcha por la Paz. Vestidos de blanco, con pancartas y plegarias, exigieron el fin de la violencia que ha dejado casi mil 900 muertos en el último año.
El recorrido inició en La Lomita y avanzó hasta la Catedral por la avenida Álvaro Obregón, luego de recibir la bendición del obispo Jesús José Herrera Quiñónez, quien pidió por un Sinaloa libre de miedo. Durante la caminata se escucharon frases como “Con los niños no”, “Somos más los buenos” y “El miedo se vive en Culiacán”.
Entre los asistentes marcharon familias de desaparecidos, víctimas colaterales y dolientes de asesinatos recientes, como los allegados de Don Rubén Aceves, un padre de familia y abuelo que perdió la vida en el ataque armado afuera del Hospital Civil. También participaron estudiantes y maestros que aún recuerdan el asesinato de Gael y Alexander, dos niños a quienes la violencia les arrebató el futuro.
Las consignas no sólo exigieron paz, también reclamaron a las autoridades. Hubo gritos de “Fuera Rocha” y cuestionamientos sobre la ausencia del alcalde Juan de Dios Gámez. La presidenta de Coparmex, Martha Reyes, junto con Miguel Ángel Taniyama, destacó que la movilización es un mensaje directo a los gobiernos estatal y federal: la ciudadanía está cansada y exige resultados.
El ambiente de dolor y resistencia se mezcló con momentos de unidad, como cuando sonó El Sinaloense, himno popular que hizo vibrar a la multitud. La jornada concluyó frente a Catedral, con testimonios, un minuto de aplausos en honor a las víctimas y el compromiso de seguir alzando la voz.
La dirigente de Coparmex, Marta Reyes hizo un posicionamiento dirigido a la Presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, donde pidió garantías de seguridad para Sinaloa, evidenció el hartazgo de la población y descontento hacia el gobierno de Rubén Rocha Moya al asegurar que la ciudadanía pide su destitución y solicitó apoyo para el sector empresarial.
De manera pacífica, pero con un clamor contundente, la marcha reunió a 50 mil personas, superando las expectativas y dejando claro que Sinaloa exige paz.
Al concluir la marcha quemaron una piñata de la mandataria nacional Claudia Sheinbaum Pardo y del gobernador Rubén Rocha Moya, al grito de “Fuera Rocha”.